30 de septiembre de 2012

Salir y tirarte en la hierba,
y que te dé el sol y dejar de pensar.
O leer a Yeats.
Estar durante horas bajo la lluvia,
bajo el agua.
Dejar de exisitir, ingrávida
hasta que aguante mi respiración
de soprano adormecida.
Salir y que no puedan distinguir mis
lágrimas de las gotas.
Pasear toda la noche bajo la lluvia
y que se lleve todo,
que arrase con todo lo demás.
Y al llegar a casa
que esté él,
sentado en algún sofá imaginario
esperándome con una manta
y sus brazos,
y chocolate
y una peli a la que ninguno prestaremos atención.
Para perdernos en los besos
(como si éstos fuesen sustitutivos
del miedo
que me enfría los pies)
"Soñar te deja los pies fríos"
(y el alma helada)

Hagámos el amor.


Y ves sus caras y dices... me gustaría ser la guitarra de algún músico y que me hagan el amor de esa manera.
Que me lleven al punto donde el placer sea tal que no quede sino un fin derrotador...
Una catarsis entre tú y yo.

29 de septiembre de 2012

Modo Fantasma: ON

Hoy llueve, pero no en mi alma. Fuera me camuflo con las gotas, me hago agua. Me transformo, sencilla, valiente y huidiza. Y resbalo por su mente y te calo, te mojo, entro en tí (o tú en mí).
El acto sexual más cálido y valiente: hoy, tú. Hoy, yo. Hoy, tú y yo.
Aunque tú no estés aquí, ni si quiera allí.
Pero hoy sé que el agua nos une. Lo siento dentro, bien dentro. Tú también lo sabes.
Y por eso, por la confianza que me da hacer el amor contigo a través del agua, activo el modo fantasma.

24 de septiembre de 2012

23.13

- ¿Y qué piensas tú al respecto?
-¿Yo?...
Yo soy agua y me estoy secando
(sólo a ratos)

23 de septiembre de 2012

Tán

"Tú y yo tenemos
el corazón de agua,
y el agua sale de arriba
de las nubes de nuestra
mente.

Somos tormenta.
Somos río.
Fluimos con suavidad
cuando nos rozan
el corazón.
Pero siempre estamos
en movimiento.
Nos llueven,
nos alteran,
nos tormentan,
nos sufren
(y nos surfrimos).
Y caemos en cataratas
de agua por alguna
rendija
a un lugar donde hay
más agua.
Etamos eternamente
condenadas al agua
...
A no ser que nos sequemos
...
O nos evaporen"
Y si un corazón de agua se estruja
el agua sale por donde encuentra rendija.




















y yo tengo el corazón de agua

Lluvia de Otoño.

Llueve por mi ventana.
Y Madrid que esta mañana vestía de sol y rojos tejados
desaparece ahora bajo la niebla
para dejar mi alma recogida
en el espacio entre mi ventana y el fin del alféizar.
-que es el fin del mundo para mi hada
y un hueco del tamaño del planeta
(el más pequeño del universo, claro)-

...
Y en línea recta desde mi nariz,
(pegada al cristal),
atravesando el barrote de esta carcel de mentira,
se ilumina lo que mi ojo izquierdo ve
para pintar de amarillo esperanza el futuro más lejano,
de sombras inciertas los edificios de mi ojo derecho,
y de luz y reflejo las casas vecinas.

...
Pero el futuro,
esta tarde de domingo,
me come la ventana, los ojos y el alma.
Viene preparado para pelear,
con ejércitos de lluvia
que me cubren las espaldas
alumbrando el camino que me queda por andar.

...
Y así, ahora,
con la lluvia sobre mi tejado
y la luz amarilla
se van descubriendo el presente y el futuro
con claros y nubes
y un incierto horizonte
que se define con la luz de los que aman
y las gotas de mi ventana.

Estaciones

Hubo un tiempo en que existía algo así como primavera y otoño. Ahora la gente sólo pasea por invierno y verano. El problema es que el invierno está empezando a ser más largo que el verano.
Y no duermo si te sueño vestido de otro color que no soy yo
Agonía vino a ser de hielo,
con vestidos blancos
y el alma negra.

21 de septiembre de 2012

20

Estoy de lluvia y de cartón.
Voltaje de tazas inconfesables
en un buenos días por la mañana.

15 de septiembre de 2012

Mi Príncipe Azul


- ¿Qué es eso, tata?
+ Una corona de princesa
- ¡Hala! ¿¡Has sido princesa algún día!?
+ Sí, fui y seré princesa
- ¿¡Y había un príncipe!?
+ Lo habrá, cariño, lo habrá
- ¡¿Y bailabas con él?!
+ Bailaré con él, sí
- Pues tata, tienes que ponerte la corona,
ser princesa
y bailar conmigo,
porque yo soy el príncipe...

 


 
Feliz cumpleaños, mi príncipe.

9 de septiembre de 2012

Sara.

De mayor voy a ser princesa y tendré una cornoa amarilla con un corazón rojo en medio, y un vestido rosa.
Una corona de esas incómodas que te obligan a tener la cabeza bien alta, a no avergonzarte de tus lágrimas, y sobre todo a mirar hacia delante. Lo que significa mirar a los otros.
Y un vestido rosa, incómodo que no me deje trepar a los árboles, pero que haga fru fru. Uno que si me caigo de culo no me vea los pies ni lo que hay más adelante, pero que me deje ver el cielo. Justo donde están las estrellas.


No sé qué clase de princesa seré, ni de quién seré princesa. Pero de mayor voy a ser princesa.




...Glamorous nymph with an arrow and bow...

7 de septiembre de 2012

79



Uno de buenos días y uno de buenas noches.
El de antes del desayuno, el de antes de la comida y el de antes de la cena. El de antes de media mañana y el de antes de la merienda. Uno entre medias de cada comida, para aguantar. El de después del desayuno, el de después de la comida y el de después de la cena. El de después de media mañana y el de después de la merienda.
Uno al salir de la ducha, y otro al entrar por la puerta.
Uno de te quiero. Uno de te odio. Uno de me angustias, y uno de te necesito.
El de después de hacer el amor y el de qué bien huele la comida. Otro si la que hueles bien eres tú. Uno por si no te veo cuando vuelvas, y uno para que pases un buen día.
Luego viene uno porque me duelen los pies, y luego otro porque estoy cansado. También uno porque hace sol, y otro porque ya anochece. Uno por estar sentado y otro por estar de pie. También por ir andando. El necesario para hacer la compra, y el de tender la ropa. Uno mientras te espero. Otro cuando ya estás conmigo.
Y dos o tres de regalo.


Hablo de tus cigarros.
(o de los besos)

6 de septiembre de 2012

18.09

Quiero bailarte un rock n' roll en la almohada
para hacerte de tangos la boca
con la última nota de la guitarra.

Mr. H.

Tanta lentitud me da vértigo.

4 de septiembre de 2012

Forget-me-nots.

Si no dejas de mirarme
Sinatra seguirá cantando
en mis oídos como un bucle
"you make me feel so young"
y tendré que sacarte a bailar.
Te lo aviso, porque luego
no quiero que te engañes
con aquello de las casualidades.
No somos coincidencia, tú y yo,
somos simples efectos
de lo inevitable.
(Patricia García-Rojo)




There are songs to be sung, 
bells to be rung,
and a wondderful fling to be flung

213.


Me he quedado pensando
que de pronto una despedida
puede ser un comienzo
(Rosana Acquarino)

3 de septiembre de 2012

Lunes.

+ ¿No odias esos relojes?
- No, ¿por qué debería hacerlo?
+ Porque el segundero va todo seguido, no hace tac tac
- ...
+ Míralo, nos está robando la vida de las manos...
- Pues habrá que aprovecharla.

Somos fugaces, resbaladizos en este tiempo que se nos escapa de las manos
y sólo hay una cosa que podamos hacer en ese vertiginoso paso del tiempo:
amar -nos-

2 de septiembre de 2012

Queda pendiente

Tenemos besos pendientes en la puerta
y en cada esquina de tu cuerpo,
digo, de tu ciudad.
Tengo pendiente cantarte
y besarte un ojo por la mañana.
Olerte recién duchado
y amarte bajo mis sábanas.
Enseñarte mi rincón favorito
y que compartamos el shushi.
Un ronroneo en el cesped
y hacer la croqueta río abajo.
Hacerte un regalo,
besarte el alma, robarte el cuello,
atrapar tus vicios y compartir lacasitos.
Tengo pendiente aprenderme tus manías
y no soportarte tres días más.
Tenemos pendiente bailar agarrados,
emborracharnos,
que me desnudes en la cocina
y hacernos un café.
Pendientes quedan las caricias en la espalda
y suspendidas en el aire
mis manos cogiendo las tuyas.
Queda pendiente
construir un nosotros.
Así que vuelvo,
con todo eso pendiente
y tu olor,
tus besos a medio cocer,
tus caricias aún húmedas
y el poema que me debes.


Hazme de estrellas fugaces
la cama.

1 de septiembre de 2012

Tú.

Septiembre se escribe con mayúscula y se pronuncia con tu nombre.
Tienes la voz grave, bebes nestea, y fumas mucho. No te gustan las cosquillas (esas suaves que a mí me encantan), pero sí el café. De alcohol: gintonic. Tienes miedo a los payasos, y no aguantas las chicharras. Comes rápido y andas rápido, pero (me) quieres despacio.
Tienes las manos pequeñas, y si no llevas gafas no me sostienes la mirada, ni me miras a los ojos cuando hablas. Duermes mucho y te gusta la combinación del verde y el azul. También te gustan los gorriones y sus saltos.
A veces ignoras lo que digo y me cortas las palabras sin quererlo. Pero como yo hago lo mismo, acabamos hablando de los higos de pascua en menos de tres minutos.
Te preocupas por mí, y de vez en cuando me vacilas (y te odio tanto cuando lo haces, que me entran ganas de besarte, lenta y dulcemente).
Sólo por las noches me robas la comisura de los labios (aunque hoy has hecho una excepción).
Cuando piensas en silencio, abstrayéndote de la realidad, haces una extraña mueca que me encanta. También de vez en cuando me regalas un detalle.
Me asombro y sonrío cuando descubro lo mucho que tenemos en común, pero me fascina descubrir todo lo que no. Me hace gracia cuando me quitas las palabras de la cabeza... "soy la voz de tus pensamientos"... y el corazón de mis palabras.
Te pones nervioso si te rozo las manos... pero te encanta. Te gusta la comida china, el queso, y todo lo que no debería gustarte, no te disgusta. Sonríes cuando bajo por las escaleras, y me propinas un "guapa" de buenos días. Y aunque pareces de hielo, te derrites lentamente si te regalo un beso de vez en cuando, agarrándome por la cinura.

Y me llamas pequeña.
Me devuelves al mundo cuando me alejo de él, sólo preguntándome: ¿qué piensas pequeña?